Teanner: una tendencia gastronómica cada vez más fuerte
Artículo revisado por el Comité
El Teanner, o té-cena, es una propuesta ideal para los que quieren cenar temprano y liviano. Se está poniendo de moda en restaurantes y casas de té. Sumáte a esta nueva moda gourmet.
Hace un tiempo que el brunch se instaló como tendencia gastronómica en nuestro país y ahora es el turno del teanner. Este americanismo viene de la conjunción entre las palabras "tea" y "dinner", té y cena en inglés, lo que traducido al castellano vendría a ser algo así como una "merencena" o "merienda-cena".
¿De qué se trata?
Se trata de una tendencia que está empezando a imponerse entre la moda de casas de té y restaurantes gourmet y que combina opciones dulces y saladas para los que prefieren estirar un poco el horario del té y hacer la última comida fuerte del día un poco más temprano. La idea es generar un mix entre una merienda potente para los que salen tarde de trabajar y una cena liviana para los que prefieren comer temprano e irse a dormir con la panza no tan llena.
El horario y el menú
El horario Teanner vendría a ser de 17 a 20 y los menús incluyen mini pizzas, focaccias, bruschettas, variedad de quesos, samosas, ensaladas, finger foods, wraps, crêpes y bagels de salmón ahumado, papas bastón, pinchitos de pollo rebozados, chipas, muffins dulces y salados, scones con mermeladas artesanales y cremas de limón, panes y pastelería casera y tortas. Se acompaña la comida infusiones frías (gaseosas, clericó/ Campari) y calientes (blends especiales de té, café y chocolate).
El lugar
En Buenos Aires: Casa Mua, Lamiabamba, La Panadería de Pablo, Pani (Palermo), Frik's deli & coffee house (Pilar)
Una receta: scones con mermelada
Para los scones 150 g de manteca, 150 g de azúcar, 2 huevos, Extracto de vainilla, 500 g de harina, Polvo de hornear, 40 cc de leche
Para el dulce 1 kg de frutillas, 150 g de azúcar rubia, Jugo y ralladura de 1 limón
Precalentar el horno a 180 °C. Mezclar la manteca con el azúcar. Agregar los huevos de a uno y sumar la esencia de vainilla. Tamizar el harina, el polvo de hornear y mezclar todo, sin batir. Una vez formada la masa, estirarla de 2 a 3 cm de espesor, cortar en forma circular con un molde y pincelar con huevo batido. Cocinar por 10 minutos y servir.
Para el dulce: cortar las frutillas al medio y mezclarlas con el limón, el azúcar y dejar 1 noche en la heladera. Al día siguiente, cocinar en una olla de fondo grueso hasta que tenga la consistencia deseada. Acompañar con crema batida o queso blanco.
Me parece muy bien para Buenos Aires. Por su jornada de corrido, pero qué nos queda para las provincias donde se para en la siesta y se reanuda en la tarde hasta altas horas en la noche.