Gastronautas 2.0: la cocina y las nuevas tecnologías
Artículo revisado por el Comité
La recomendación “boca a boca” ha sido siempre la mejor manera de atraer nuevos clientes y, hoy en día, las reglas de la popularidad se miden en un contexto totalmente renovado. Las redes sociales y los foros temáticos son ya moneda corriente y su influencia está en permanente crecimiento. El boca a boca sigue triunfando y amplía sus horizontes gracias a las nuevas tecnologías.
La recomendación “boca a boca” ha sido siempre la mejor manera de atraer nuevos clientes a un negocio y, hoy en día, las reglas de la popularidad se miden en un contexto totalmente renovado. Las redes sociales y los foros temáticos son ya moneda corriente y y su influencia está en permanente crecimiento. El boca a boca sigue triunfando y amplía sus horizontes gracias a las nuevas tecnologías.
"La comida es el nuevo rock ‘n’ roll" escribió el periódico inglés The Telegraph refiriéndose a la actividad de los gastronautas, aquellos usuarios de la red que se dedican a compartir, comentar y recomendar circuitos gastronómicos. Se trata de jóvenes que buscan nuevas tendencias y sitios adonde comer bien cocina de vanguardia o cocina tradicional.
¿Cómo funciona?
Los gourmets 2.0 o gastronautas son un grupo de amantes de la cocina que se dedican a recorrer cocinas ambulantes, restaurantes clandestinos y localizar las modas más auténticas y aventureras para compartirlas luego con sus amigos y seguidores de Twitter y Facebook. En Londres, Los Ángeles, París o Nueva York la tendencia foodie ya es popular entre hipsters y visitantes de restaurantes underground. El fenómeno ya se está volviendo global.
¿Esnobismo o democratización del paladar?
Mientras que para algunos esta práctica resulta un tanto esnob y pretenciosa por parte de los degustadores amateur, otros encuentran un gran potencial en ella puesto que muchos mercados se están abriendo y existe una voluntad general por cuidar la alimentación y experimentar nuevos sabores.
A través de las redes sociales se encuentran personas con intereses parecidos que buscan también productos de calidad y a un precio accesible y que confían más en la voz del usuario promedio que en la de la prensa y los críticos especializados. El intercambio de opiniones cumple un rol de socialización fundamental para el trabajo del gastronauta.
La ley de las tres B (bueno, bonito y barato). Los cool hunters de la gastronomía priorizan la búsqueda de sitios económicos y alternativos que ofrezcan una decoración original y cocinen como en casa. El futuro se encuentra en la cocina tradicional adaptada a los tiempos modernos en conjunto con la calidad y el buen servicio.